FRANCIA-SARKOZY

Libreria Strand-NYC

En otras ocasiones he escrito sobre el Presidente Sarkozy y la Francia sarkotyzada, de los temores y el desasosiego que me causo su abultada victoria. En mi caso, que fuí un entusiasta seguidor del liberal Bayrou de MoDem, pero que como mal menor hubiese preferido a Ségolène Royal frente al omnipresente y prepotente Sarkozy, al ganar este en mi idealizada visión de Francia, esta se desmorono totalmente.
Pero también como escribi hace menos de tres meses mi rechazo radical hacia el personaje estaba bajando en intensidad, el mismo se diluia con cierta aprobación de sus actos coincidiendo con la aparición de la estupenda Carla Bruni. Recuerdo que en honor a Woody Allen, llegue a denominarlo Zelig-Sarkozy, en consonancia con la película del genial director en la que el protagonista iba adquiriendo la personalidad de los personajes cercanos a él, en el que llegaba incluso a adquirir una grotesca y similar apariencia física de esos personajes.
De las iniciales y detestables acciones del nuevo Presidente, como su visita a Libia para liberar a una enfermeras Búlgaras a cambio de una Central Nuclear; a la liberación de los miembros de una ONG que secuestraba niños del Chad para entregarlos a familias acomodadas francesas; a la aparente sumisión de Francia a Bush; y a todos los actos que parecia que Francia pasaba a ser un pais de segundo nivel, en lugar de la Francia de siempre liberal, progresista y culta.
Pero en eso llegó Carla Bruni y en poco tiempo la influencia de esta seguidora y votante declarada de Ségolène Royal produjo un milagro, Francia volvía a ser la de siempre, la abanderada de las libertades, relanza de nuevo la idea de Europa, y como no, se postula como único lider de la misma, un lider en teoria de derechas pero que sigue ideas de la izquierda más liberal. Abanderado de la reforma del sitema capitalista (el sistema francés), apoyo decidido y sin fisuras al Dalai-lama frente a las protestas chinas y la proposición a la ONU para la despenalización mundial de la homosexualidad (circunstancia rechazada por el Vaticano que con su oposición a la misma aprueba la pena de muerte a los homosexuales en muchos paises, hecho del que no me cabe ninguna duda de que de existir Jesucristo en la actualidad seguro que apostataria del catolicismo) y otras muchas más acciones encaminadas hacia el progresismo más liberal.
En un futuro muy próximo es de esperar que un tandem Obama-Sarkozy y apoyado por el cada vez menos fiable (en relación a los catalanes) Zapatero, cambién la tétrica dirección que estaba llevando el mundo de la mano de los neocon.
Soy optimista y tengo esperanzas, pero en época de crisis y no solo de económica, un poco de humanismo social no nos viene mal.
El próximo martes efectuo una de mis visitas periódicas por la Catalunya Nord y el sur de Francia, pasado el susto del inicio sarkozyniano mi patria de corazon vuelve a ser la de siempre y de buen seguro que bien vale una nueva visita.